Esculturas

esc_28
esc_27
esc_26
esc_25
esc_24
esc_23
esc_22
esc_21
esc_20
esc_19
esc_18
esc_17
esc_16
esc_15
esc_14
esc_13
esc_12
esc_11
esc_10
esc_09
esc_07
esc_08
esc_06
esc_05
esc_04
esc_03
esc_02
esc_01
previous arrow
next arrow

 

Lo maravilloso de la escultura es lograr pasar de la nada a una forma que muchas veces decide surgir sola.
Es tan grande el placer que da modelar la arcilla con las manos, vaciar un molde, tallar madera, lijar o patinar una obra terminada que resulta difícil transmitir la sensación en palabras.
Cuando se talla madera, en algunos momentos el trabajo es duro, meticuloso y prolongado.
La satisfacción al final, ante la obra terminada y brillante después de muchas horas de pulido y lijado, es única.
Los invito a intentarlo al menos una vez en la vida.

 

Scroll al inicio